¿Cómo preparar archivos para impresión en gran formato? ¿Cuántas veces te ha tocado pedirle a un cliente el arte de una imagen publicitaria en gran formato y te lo envía en medidas y resolución inadecuadas?

Esto suele suceder mucho más seguido de lo que se cree, es por eso que queremos guiarte sobre cómo preparar estos archivos para una impresión de alta calidad y gran tamaño.

La idea no es armar un diseño con un tamaño gigante, a una súper resolución, ya que porque demoraremos más del triple en diseñarlo y editarlo. Si el tiempo que tenemos para la entrega del diseño es corto, podemos meternos en un problema serio.

El gran formato es en realidad un término relativo porque los tamaños máximos de impresión varían de una imprenta a otra. Por lo que nos es considerado como un producto en sí, sino más bien se hace alusión a las dimensiones del impreso, por ello comprende diferentes productos, como lonas, pósters, banners, carteleras, pendones, vallas, roll-ups, rotulación en vehículos, rotulación de stands e interiorismo, etc.

El gran formato permite un mayor alcance en cuestión de impacto visual, es decir, puede llegar a más personas y al mismo tiempo puede cumplir la función de ambientar espacios (arquitectura efímera en stands y escenografías) y fomentar la participación del público en los productos exhibidos.

Uno de los problemas más comunes a la hora de imprimir trabajos en gran formato, sobre todo en nuestros inicios, ha sido la dificultad de reflejar fielmente en viniles, lonas o cualquier otro sustrato lo que vemos en la pantalla de nuestra computadora. Por lo que más que explicar el proceso, siempre conviene saber ciertos fundamentos de impresión para comprender lo que estamos haciendo y de esta forma obtener el resultado deseado.

Siempre se deben tomar en cuenta las diferentes variables que en cada proyecto  intervienen como la distancia a la que se percibirá el gráfico por el público receptor y cuál es el fin del arte exhibido.

La impresión de gran formato se utiliza para llamar la atención desde lejos como son carteleras, universidades, edificios o para ser apreciada a detalle como en exhibidores de POP (Displays de Punto de Venta), stands y escenografías.

Por ejemplo las carteleras o espectaculares están diseñados para verse en segundos y en ese tiempo sólo es posible absorber muy poca información. Por eso, el público que recibe el mensaje se enfoca en el encabezado y en la información mínima necesaria.

Sé que estás preguntándote varias cosas a la vez. Te invito a que sigas mis artículos para que este mundo de la impresión en gran formato te genere resultados positivos en la calidad de tu trabajo y sobre todo, la optimización de tu tiempo y de tus clientes.

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